Mediante el “Plan Cero Ocio”, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, sacó a más de 2.000 reos a cumplir con trabajos comunitarios para resarcir el daño causado por las pandillas a la sociedad.
Las calles de El Salvador se tiñeron de amarillo con más de 2.000 reos (cometieron delitos menores) que fueron sacados custodiados a órdenes del presidente Nayib Bukele y su “Plan Cero Ocio”, mediante el cual se vieron obligados a realizar trabajos comunitarios.
Uniformados con poleras amarillas, gorras del mismo color, busos negros o pantalones jean, y equipados con carretillas, escobas y bolsas de basura para cumplir con su labor, los reos cumplieron con este plan.
Su labor aparte de limpiar las calles, pintar edificios gubernamentales, ayudar a construir hospitales y escuelas, es trabajar dentro de las cárceles en las fábricas y actividades productivas; medidas adoptadas con el fin de resarcir el daño causado a la sociedad, según un comunicado del gobierno salvadoreño.
Además de ello, los internos apoyan en la limpieza de playas, colaboran en la infraestructura policial, construcción de viviendas para familias de escasos recursos económicos, despintan los grafitis de las pandillas para lograr una ciudad libre de este tipo de imágenes a petición del gobierno salvadoreño, entre otras actividades.
El “Plan Cero Ocio” es parte de las medidas que Bukele adoptó contra la delincuencia; se viene implementando desde mediados del 2021 con reos en fase de confianza. Aseguró que esta iniciativa logró hábitos positivos y disciplina laboral.
“Con estas acciones se ha roto al 100% con el ocio carcelario y hay un quiebre de las acciones que convertían a las cárceles en universidades de crimen”.
Detención de pandilleros
Dentro de barriles, cajones, entre ladrillos, en pilas o cisternas llenas de agua, en granjas agrícolas debajo de bultos de comida para animales y alcantarillas, fueron encontrados y trasladados a la nueva megacárcel de El Salvador los primeros 2.000 pandilleros de la Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18.
Con las manos esposadas en sus espaldas, fueron subidos a autobuses y trasladados bajo fuertes medidas de seguridad hacia el nuevo centro penitenciario, a donde llegaron cerca del amanecer y fueron encerrados en sus celdas.
Se caracterizan por extorsiones, sicariatos, secuestros; todos tienen tatuajes, se cree que el pandillero que más tatuajes tiene es el más poderoso.
En esa línea, luego de las fuertes persecuciones policiacas, los pandilleros se vieron obligados a dejar de sembrar el terror en las principales ciudades y esconderse. El Salvador suma 300 días sin homicidios bajo un régimen de excepción.
Bukele y la guerra contra los pandilleros
Bukele pretende ganar la guerra a grupos pandilleros, la guerra del terrorismo, que inició en marzo de 2022, cuando el gobierno salvadoreño responsabilizó a la pandilla Mara Salvatrucha por una ola de homicidios entre el 25 y el 27 de marzo de 2022, en la que 88 personas fueron asesinadas.
Así, en 2022 se habían reducido en un 57% los homicidios gracias a la detención de unos 64.000 supuestos pandilleros o personas ligadas a ellos.
La nueva megacárcel construida en El Salvador es la más grande de América, apta para alojar hasta 40.000 pandilleros.