Una aeronave bimotor modelo Séneca, matrícula PT-RBC, fue interceptada el domingo 13 de abril por la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) tras ingresar sin autorización al espacio aéreo del país.
El avión, que transportaba droga y tenía origen en Perú, fue detectado por los radares del sistema CINDACTA IV cerca de las 9:00 a.m. y escoltado por cazas A-29 Super Tucano.
Al no responder a los intentos de comunicación ni acatar las órdenes de desvío, se activaron los protocolos de defensa aérea.
La aeronave descendió sin control y se estrelló en una zona remota próxima al río São Manoel, entre los estados de Mato Grosso y Pará, cerca de la comunidad indígena Ariramba.
El impacto provocó un incendio parcial de la carga. Agentes de la FAB, transportados en un helicóptero H-60 Black Hawk, hallaron entre los restos a dos ocupantes bolivianos de 30 y 32 años, quienes fueron llevados bajo custodia al Hospital Regional de Alta Floresta.
Uno de ellos sufrió una fractura grave en la pierna.
Sus identidades no fueron divulgadas.
En el lugar del accidente, las autoridades incautaron 51 kilogramos de skunk, una variante de marihuana de alta potencia, parte de la cual fue consumida por el fuego. La acción formó parte de la Operación Ostium, enmarcada en el Programa Integrado de Protección de Fronteras (PPIF).
Una vez reciban el alta médica, los implicados serán trasladados a la sede de la Policía Federal en Cuiabá, donde enfrentarán cargos por narcotráfico y violación del espacio aéreo.
