
La viceministra de Comunicación alertó sobre la retención de 1.600 millones de dólares en la Asamblea Legislativa, lo que, dijo, afecta la estabilidad económica y el abastecimiento de combustible en el país.

La viceministra de Comunicación de Bolivia, Gabriela Alcón, denunció que actualmente hay 1.600 millones de dólares bloqueados en la Asamblea Legislativa, debido a lo que calificó como «un capricho político». La autoridad instó a la población y a las instituciones a presionar al órgano legislativo para destrabar estos fondos y aliviar la situación económica del país.
Según Alcón, la retención de estos recursos impacta en el movimiento de divisas y en la capacidad del Gobierno para garantizar el suministro de combustible. La viceministra destacó que, a pesar de las dificultades, el Ejecutivo continúa cumpliendo con el pago de la deuda externa y realizando gestiones para mantener la estabilidad económica.
Asimismo, Alcón resaltó el problema de la caída en la producción de gas y petróleo desde 2014, una situación que ha llevado a Bolivia a aumentar significativamente sus importaciones de combustible.
Explicó que la falta de exploración en el sector hidrocarburífero ha obligado al país a depender, en mayor medida, de las importaciones, cuyo costo se ha disparado en los últimos años.
«En 2019, destinamos 1.500 millones de dólares a la importación de diésel y gasolina. El año pasado, en 2024, esa cifra se elevó a 3.300 millones de dólares, más del doble», señaló la autoridad.
La viceministra hizo un llamado a destrabar el financiamiento externo para garantizar la estabilidad económica del país y evitar mayores dificultades en el abastecimiento de combustibles. Su declaración refleja la creciente preocupación del Gobierno por el impacto de las decisiones legislativas en la economía nacional.
Fuente: El Deber