Sucedió en El Alto. El joven de 21 años salió a jugar fútbol y luego se fue a compartir a la casa de uno de sus amigos, tras una discusión lo golpearon y propinaron dos apuñaladas

En un pozo de ocho metros acabó la vida de Christian Vidal Sanjinéz Guarachi. También ahí fueron enterrados sus sueños de convertirse en un futbolista. Sus amigos, con los que compartió su último partido de fútbol en la ciudad de El Alto, fueron quienes le cercenaron la vida.
Sucedió el 12 de diciembre de 2021 cuando se fue a la casa de uno de ellos para compartir bebidas alcohólicas después del partido que disputaron en la cancha de fútbol 3 de Mayo.

 El alcohol y una discusión dieron pie a la tragedia. Los amigos intentaron borrar el rastro del crimen llenando de palos, piedra y tierra el pozo, pero el testimonio de una testigo fue clave hizo que el delito sea revelado.

El crimen
Las investigaciones de la Policía y la Fiscalía detallan el último día de vida de Christian. Ese fatídico 12 de diciembre, a las 16:00, el joven salió de su casa ubicada en la zona Los Jardines, en la ciudad de El Alto. Esa fue la última vez que su familia lo vio con vida.

Salió con una chamarra y polera negra, jeans plomo y tenis negros. Con esa misma vestimenta sería encontrado diez meses después. Durante ese tiempo sus padres vivieron un calvario.

Testigo clave
El testimonio de una vecina fue clave para que los investigadores dieran con la casa donde fue visto por última vez Christian. La testigo dijo que lo vio ingresar a una casa de la zona Alonso de Mendoza, en Ventilla, Distrito 8 de la urbe alteña, junto a Vladimir E. C. V. (26) y Ruddy S. M. Y. (27). El primero es el propietario del inmueble.

Cuando la Policía los entrevistó brindaron declaraciones contradictorias y quedaron aprehendidos. Ahí fue cuando confesaron lo que habían hecho.

Así se supo que la casa de Vladimir fue el escenario del asesinato. De hecho, él mismo fue quien lo golpeó y apuñaló tras una discutir. Cuando Christian, así malherido, intentó escapar intervino Ruddy. Los dos amigos, convertidos en criminales, metieron nuevamente a su víctima al interior de la vivienda. Hay una tercera persona que también es investigada.

El cuerpo del joven que, pertenecía a la Escuela de Fútbol del Club Bolívar, fue arrastrado a un pozo de ocho metros que contenía agua y tapado con piedras, palos y tierra. Allí permaneció diez meses.

El cuerpo

Cuando Vladimir se enteró que la familia empezó a buscar a Christian optó por guardar silencio y, tres semanas después del crimen, tras cobrar su sueldo, se mudó a Mapiri, al norte de La Paz.

Alejado de la vivienda donde enterró a su amigo, creyó que no volvería a saber de la situación. Pero su suerte cambió esta semana.

El fiscal departamental de La Paz, William Alave Laura, indicó que el Ministerio Público inició un proceso en contra de Vladimir E.Chávez V., de 26 años y Ruddy S.M.Y., de 27 años, por el crimen cometido en contra de Christian.
También señaló que el jueves, 13 de octubre, un equipo conformado por la Fiscalía, la Policía y la unidad de Bomberos, allanó la casa de Vladimir. Eso no fue todo, después de realizar la excavación, con la ayuda de maquinaria pesada, encontró los restos mortales del joven que soñaba con ser futbolista.

«La Fiscalía Especializada de Trata y Tráfico inició la investigación con los datos proporcionados por la madre del joven desaparecido, se solicitó el allanamiento a la vivienda al juzgado, se tomó la declaración informativa al hijo de dueño de casa quien reveló el hecho, por lo que se pidió el apoyo logístico de las unidades policiales para el rastrillaje con canes y la excavación del pozo donde se habría señalado que se encontraba el cuerpo”, dijo Alave a los medios de comunicación.