El cerco y los conflictos en el oriente muestran sus efectos, también, en los avicultores.
Pollos en un galpón de una granja en Cochabamba.
El cerco y los conflictos en Santa Cruz muestran sus efectos, también, en los avicultores. El sector reporta que la semana pasada murieron más de 1 millón de pollitos bebés que se quedaron en camiones varados, mientras que el alimento balanceado para pollo escasea en Cochabamba.
“La semana pasada hemos tenido cerca de un millón de pollitos bebé que no han ingresado a granjas. Ese pollito bebé terminó muriendo en los camiones, al igual que en Yapacaní, donde hubo varios camiones que tuvieron que retornar con huevo que se dañó”, informó el presidente de la Asociación de Avicultores de Santa Cruz (ADA), Omar Castro.
Según el representante, el cerco no permite que los camiones con carne magra y huevo lleguen al resto del país. Además, no se garantiza el abastecimiento de alimento balanceado para granjas en el valle.
“Desde Cochabamba no pueden venir a comprar. Aquí compran el 70% de granos e insumos para la elaboración de alimentos para las aves allá, que es el segundo productor boliviano de productos avícolas”, añadió.
Castro explicó que Santa Cruz produce el 95% de pollitos bebé y que semanalmente envía al interior 1.7 millones de pollos para engorde, 12 millones de huevos frescos y 1.4 millones de pollos, que significan 3.000 toneladas de carne.
La pérdida económica sería de más de 3 millones de bolivianos semanales sobre la muerte de pollitos bebés y huevos que se echan a perder.