Esta es una increíble historia de dos seres que estaban predestinados a estar juntos.

En 2017 la profesora Candy Escalante fue destinada a trabajar en Melón Pujio, cerca de #Chuquisaca, por el río Pilaya, ahí conoció a Vandam, ese año él era un cachorro, pertenecía a uno de sus alumnos, lamentablemente su familia lo tenía descuidado y malnutrido, la profesora empezó a invitarle comidita, habló con la familia intentando hacerles comprender que cuando uno tiene un animalito le debe procurar cuidados básicos, pero no todas las personas tienen el don de la empatía.

Vandam estaba encariñado con la profesora pero ella no podía llevárselo, solo podía darle cariño y cuidados mientras estaba allá, llegaba vacaciones y con mucha tristeza le tocaba despedirse de Vandam con la esperanza de volverlo a ver, cada retorno de vacaciones le tocaba encontrar a Vandam flaco y descuidado.

A los años, (a fines del 2021) no faltó un comunario intolerante que envenenó a varios animalitos en la zona, a la profesora le contaron que habían muerto varios perritos y gatitos, desde esa vez ella no volvió a ver a Vandam, se quedó con la pena de que él había sido una de las víctimas de aquel salvaje acto.

Hasta que a mediados del 2022, haciendo compras en el mercado campesino de #Tarija, su hijo lo vio y reconoció, ella no podía creer, ¡era #Vandam! Lo reconoció porque tenía puesto un collar de San Roque que ella misma le había hecho con mucho cariño y se lo había puesto un año atrás.

Ella pensó que alguien lo había traído a Tarija para salvarlo del envenenamiento masivo que se dio en su localidad.

Consultó con gente del lugar para saber si lo conocían, le dijeron que “ese perrito apareció un mes atrás y que algunas vendedoras le invitaban restos de comida, que por eso permaneció en la zona”.

Ella le compró comidita y pese a vivir en otra localidad procuró ir a verlo fines de semana, hasta que un fin de semana no lo volvió a ver más, hasta que a fines de marzo del 2023, una de las voluntarias de Fundación Corazón Animal-Tarija, conoció a Vandam por la rotonda del B. Aeropuerto. Vandam era un perrito cariñoso, ella le invitó comida y él en agradecimiento la escoltó hasta su casa, ahí ella se percató de que él tenía collar de San Roquito y lo publicó buscando a su familia, así es que la profesora reconoció el collar y se comunicó contando su historia de Vandam.

Lamentablemente ella seguía impedida de poder llevarse a Vandam, quien se quedó viviendo como perrito comunitario en B. Aeropuerto.

Una buena vecina le cocinaba cada día.

Mediante la Fundación se le procuró sus vacunas y apoyo veterinario cuando Vandam fue atropellado, porque estando en la calle un día lo atropellaron.

Reiteradas veces subieron publicaciones de Vandam buscándole hogar, porque los inviernos son crudos en Tarija y él seguía en situación de calle, nunca tuvieron suerte, y era porque Vandam estaba predestinado desde un principio para quien fue su primer benefactora, antes no era el momento pero ahora sí, y desde este lunes 1 de julio de 2024 Vandam ¡ya tiene familia!.

No se puede explicar en palabras lo emocionante que fue cuando Vandam se reencontró con la profesora, es como que él siempre la hubiera esperado, se dejó poner correa con ella y se subió al taxi, en su casa de ella reconoció a Borbojo, un antiguo amigo canino que la profesora rescató de la misma localidad Melón Pujio.

Nos encontramos muy felices por Vandam,

Agradecemos a la Profesora Candi Escalante por su gran corazón, así también a Lili, un excelente ser humano que año redondo alimenta perritos en situación de calle. Vandam ya no volverá a pasar frío, ¡ya se nos hizo el milagro!